Cerca de la estación de Sants, encontramos esta rehabilitación integral de uno solo piso por planta.
Entramos por el piso de ochenta y ocho metros cuadrados por un recibidor-distribuidor y nos lleva a la derecha a la zona de día del piso, compuesta de cocina abierta, aseo de cortesía y una amplia sala de estar con salida a balcón.
Al otro lado del piso encontramos la zona de noche, con dos habitaciones dobles, una con baño completo en suite y otra con combo lavabo + bañera, orientadas a un amplio patio de manzana.
El piso incluye además veinticinco metros cuadrados de terrado de uso privativo con vista al Tibidabo.
El Edificio del siglo XIX conserva todavía la fachada original exterior y combina una inteligente redistribución de cada espacio, con la influencia estética de materiales antiguos como el ladrillo de obra vista en paredes, vigas de madera tratada en el clásico techo de viga catalana o el hierro forjado que encontramos en balcones y escalera.